Joseíto Mateo es, sin duda, uno de los grandes íconos del merengue dominicano. Su larga trayectoria como cantante y compositor y su latente humildad le han permitido mantenerse en el gusto del público por varias generaciones.“Un momentito please”, dijo José Tamárez Mateo, nombre de pila de Joseíto, al contestar una llamada de elCaribe. “Me alegra mucho escucharla. Pregúnteme todo lo que quiera”, continuó diciendo con entusiasmo desde su residencia en la ciudad de Nueva York.
Con un tono de voz pausado, “El Negrito del Batey” se refirió al homenaje realizado en su nombre en la pasada gala de los Premios Soberano a cargo de los salseros Gilberto Santa Rosa y José Alberto “El Canario”.
“Me sentí muy agradecido con este homenaje que me hicieron. Muy agradecido con Edilenia (Tactuk), mi gran amiga, a quien le agradezco muchísimo porque ella fue la que más se empeñó en hacerme eso, quiso hacerme algo distinto, y sinceramente nunca me habían hecho un homenaje de esa magnitud; e indiscutiblemente, también darle las gracias a estos grandes cantantes que prestaron sus voces para mí, como fueron El Canario, mi gran amigo, y Gilberto”, expresó el Gran Soberano de 2004, cuando el galardón aún llevaba el nombre de Casandra.
A sus 96 años, “El Rey del Merengue” entiende que ya ha conseguido todo lo que podría desear y que solo le resta agradecer a Dios por darle larga vida y porque aún puede cantar y componer “música folclórica de mi país” para que los próximos exponentes puedan escuchar cómo eran “los merengues de antes”, y a su público por siempre orar por él.
Comentarios