Hablar de Don Radhamés Gómez Pepín, es hablar de un templo en la comunicación, un periodista serio a carta cabal, su unico norte estar siempre a la defensa de los derechos del ciudadano, no dejar pasar noticias que signifiquen hechos. con un olfato que yo creo, pocos lo tienen. No se podrá escribir la accidentada historia- accidentada por haber dejado sus mártires, sus incomprensiones y sus incomprendidos, en la vorágine, en la condición especial que es el vivir la violencia diaria de un país del llamado Tercer Mundo-del periodismo dominicano sin incluir el nombre de Radhamés Virgilio Gómez Pepín. De don Radhames Gómez Pepín aprendí que en periodismo no se debe tener miedo, y que todo lo que signifique noticias deberás salir a la luz publica. De don Radhamés me siento muy orgulloso de haberme hecho periodistas, nunca podré olvidar sus sanos consejos