BONAO.-Diferentes personalidades de distintos lugares y extractos sociales del país dieron el último adiós al laureado artista plástico Cándido Bidó, quien falleció la noche del Lunes en el Centro de Diagnóstico, Medicina Avanzada de Conferencia Médicas y telemedicina (CEDIMAT)Los oficios religiosos se efectuaron en la iglesia San Antonio, donde se congregaron cientos de personas procedentes de diferentes localidades del país, para despedir los restos del famoso maestro del pincel u fundador de la Plaza de la Cultura de Bonao.
El cortejo fúnebre partió desde la Plaza de la Cultura, desde la que fue su segunda casa, en la calle San Antonio, y recorrió varias calles del municipio hasta llegar al cementerio Caracol, en la calle Duarte, donde el doctor Pedro Romero Confesor leyó el panegírico.
Los restos de Bidó llegaron a esta ciudad alrededor de la once de la mañana, e inmediatamente fueron velado en uno de los salones de la Plaza de la Cultura que el propio artista fundo en esta ciudad, y luego trasladado a la Iglesia San Antonio.
El cantante Héctor Acosta, interrumpió su gira artística por los Estados Unidos para venir a Bonao a asistir al sepelio de su compueblano, que lo admiraba bastante.
Bidó falleció a los 74 años de edad, afectado de una enfermedad cardiovascular, fue considerado un símbolo de Bonao por su trayectoria como artista, y como munícipe. Desde muy joven se enroló en las artes plásticas.
El cortejo fúnebre llego a Bonao a la 10:20 de la mañana concentrándose toda una multitud en la avenida Libertad expresando dolor y su creatividad cultural folklórica y artística recibida por el maestro fallecido Cándido Bidó.
Diferentes alumnos de la Plaza de la Cultura, pintaban algunos mientras eran velados los restos del artista en una carpa improvisada frente a los locales que alojan la entidad cultural, por donde desfilaron miles de personas que dieron el último adiós a uno de los hijos de Bonao más prominente.
Los restos del maestro Bidó fueron llevados al cementerio en medio de un gran desfile que encabezaron las principales autoridades de la provincia, así como artistas plásticos de Santo Domingo, que lloraron la irreparable pérdida de este valioso ser humano.
Las notas del Himno Nacional fueron interpretadas por la banda municipal del ayuntamiento local, en tanto que la canción Paz en la Tormenta, fue dedicada por el Torito al maestro Bidó.
Los restos del distinguido artista fueron sepultados en su propia bóveda que había diseñado el propio Bidó hace 11 años, y que el pasado sábado ordenó limpiarla.
Previo al sepelio se leyeron diferentes poemas dedicados al extinto artista nouelense, y varias canciones fueron entonadas por estudiantes y artistas plásticos que participaron en el desfile.
El doctor Pedro Romero Confesor, Juez de la Suprema Corte de Justicia tuvo a su cargo la lectura del panegírico, previo a los honores militares que le rindieron altos oficiales de la Fuerza Aérea Dominicana, de la cual Cándido Bidó era coronel full.
Ayer, la Sala Capitular del ayuntamiento de esta ciudad declaró tres días de duelo por el fallecimiento del artista nouelense atendiendo a una propuesta del síndico Alberto Marte. El maestro Bidó fue declarado “Gloria Local de las Artes y la Cultura” por el ayuntamiento de aquí.
Al partir hacia la plaza de la Cultura, momentos después cientos de personas se unían a la caminata del sepelio y se confundían entre pésame a los dolientes y dolor en lagrimas y desesperación por la muerte a destiempo del excelso pintor dominicano, lanzándoles al ataúd diferentes mensajes y flores en alusión a los colores que utilizaba Cándido Bidó en sus obras.
Con la desaparición de Cándido Bidó la bellas artes, las artes plásticas, el carnaval, y la clase artística en general de nuestro país pierde a uno de sus mejores exponentes y creadores artísticos, pero jamás el maestro morirá porque sus obras lo han inmortalizado desde ya expresaron los artistas que asistieron a Bonao a darle su último adiós.
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