BONAO.-Expresiones, técnicas y variadas temáticas fueron plasmadas en el lienzo por un grupo de artistas nacidos en un mismo lugar, y que unidos por el talento y su amor por su pueblo, dieron vida a la exposición “Bonao, Tierra de Colores”, que se exhibe en las instalaciones de la Embajada de Francia y con la coordinación del Centro Cultural Cariforo y el Museo Cándido Bidó. 23 obras pictóricas, 10 esculturas y una silla están puestos a disposición de quienes buscan en la cultura un espacio para relajarse y dejar a un lado los problemas cotidianos por los cuales atraviesan la mayoría de los seres humanos. Nueve pintores: Cándido Bidó, Julio Valentín, Antonio Nuñez, Enrique Nuñez, Inés Jaquez, Elías Reyes, Yan Luis Páez, Yanni Cáceres, Félix Gutiérrez. En las esculturas de Cristián Tiburcio, Juan Trinidad y Benito Cuevas, son los creadores de esta colectiva llena de colorido y rica en contenido. Como explica la crítica de arte y directora del Centro Cultural Cariforo, Marianne de Tolentino, “La paleta cálida, en los rojos, amarillos, verdes, hasta en los azules y el negro, exalta en esta visión coloreada, no solamente los tonos y la luz del exterior, sino el “ojo interior” del autor que fortalece la realidad cuando no la transforma. Pues son las figuras, o sea lo real observado, que inspiran a los artistas, aunque partes abstractas intervengan en la obra”. Bonao es definitivamente una tierra de colores y una ciudad de artistas.
Esta foto del periodista Miguel Hernández, muestra a este pobre joven (indigente), con varios meses recoriendo las calles de Bonao, sin que las autoridades competente hagan algo al respecto. Este pobre ser humano, tiene más de dos meses “viviendo” donde le coja la noche, esta tarde estuvo paseando frente al cuartel policial de aquí de Bonao, el guardia de servicio lo vió y dijo "Ni palla voa mira", en la misma entrada principal de la dotación policial fue fotografiado por el periodista Hernández . Este indigente desnutrido y falta de cucharas, se baña desnudo y hace sus necesidades fisiológicas a la vista de todo el mundo. La permanencia a la intemperie, harapiento y desnutrido de este pobre loco, se ha convertido en espectáculo para los transeúntes que a diario se desplazan a pie y en vehículos por calles de Bonao. El hombre, con visibles signos de trastornos mentales, tiene su mente en blanco, por lo que las autoridades de Salud Pública tienen que hacer algo para que el es
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