A medida se acerca las elecciones, el tono del debate comienzan elevarse entre los seguidores de los candidatos de los partidos mayoritarios. La preocupación de diversos sectores, incluida la Iglesia Católica ante posibles agresiones físicas debe llamar la atención de quienes aspiran a dirigir el Estado dominicano. Es sabido, que cuando las tensiones suben arriba, entre los contrincantes, abajo en los seguidores la leña comienza arder y vienen los enfrentamientos físicos. Como refiere el arzobispo de Santiago, Ramón Benito de la Rosa y Carpio no solo en Semana Santa debe hacerse una tregua, sino que todos los actores del proceso deben colocar su granito de arena para evitar las confrontaciones. Es necesario que hable con los seguidores para que entiendan que el 20 de mayo cuando se ofrezcan los resultados y se diga quién será el próximo presidente de la República, el que resulte derrotado no acuda al discurso incendiario y mucho menos a los alegatos de fraude. Ya el pueblo aprendió a v...