Cientos comenzaron a abandonar ayer la Capital con destino a localidades del interior y hasta para Haití, con miras a despedir el presente año y esperar el nuevo junto a familiares y amigos.
Aunque en la mañana de ayer el flujo de pasajeros comenzó tímido en algunas paradas de autobuses y minibuses, aumentó en horas de la tarde.
En las terminales del Metro y Caribe Tours los pasajeros comenzaron a llegar desde las primeras horas para salir con destino a pueblos del Cibao, el Sur y el Este del país.
En las paradas del kilómetro 9 de la Autopista Duarte el flujo de personas se inició lento, pero fue subiendo en la misma medida que avanzaban las horas, ya que muchos trabajaban hasta el mediodía
También los autobuses y minibuses con destino a los pueblos del Este comenzaron a trasladar a decenas de personas hacia San Pedro de Macorís, La Romana, Higüey, Hato Mayor y El Seibo.
Lo mismo sucedía en las paradas del Sur, principalmente en la avenida Duarte, donde los pasajeros abordaban los autobuses con destino a Baní, Azua,San José de Ocoa, Barahona, San Juan, Pedernales, Elías Piña, entre entre otros pueblos de la región.
Andrés Lugo, de la ruta Santo Domingo-Pedernales, atribuyó la poca presencia de pasajeros en esa ruta a que todavía hay muchas personas que salieron hacia ese destino para la Nochebuena y no han regresado.
Lisa Pérez esperaba en Caribe Tours para abordar un autobús con destino a Barahona, acompañada de su esposo, Walter Coco, y su hija, para pasar el Año Nuevo con su madre y regresar luego a Santo Domingo.
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