La llegada de un año nuevo llena a la gente de esperanza, de que las cosas marcharán mejor. Muchas tradiciones alrededor del mundo mantienen viva esa llama de esperar nuevas oportunidades. Además de los abrazos, las felicitaciones y buenos deseos, cada país tiene su forma particular de celebrar la llegada de un nuevo año. Otro festejo casi universal es descorchar una botella de sidra o champagne y brindar a la medianoche.
En España celebran comiendo 12 uvas, mientras suenan las 12 campanadas de la medianoche, tradición que han copiado en otros países alrededor del mundo.
Los italianos inician la "notte di Capodanno" con una tradicional cena en la que las lentejas son plato imprescindibles, si se quiere tener un año nuevo repleto de buena fortuna.
En algunos lugares como Roma y Nápoles se acostumbra también lanzar trastos viejos por la ventana: es una forma de terminar con el pasado y expresar el deseo de empezar una nueva etapa con buen pie. En Londres, la gente se concentran en Trafalgar Square o Picadilly Circus; otros prefieren acudir ante el Big Ben. A medianoche, la gente entrelaza sus brazos y cantan una antigua canción llamada "Auld Lang Syne". Al día siguiente, muchos niños se levantantemprano y se lanzan a las calles para cantando a cambio de monedas o caramelos.
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