
Con su habitual sotana blanca, el Papa descendió lentamente la escalinata del avión, al pie de la cual sobre una alfombra roja lo esperaba el presidente mexicano Felipe Calderón, acompañado de su esposa Margarita Zavala, y de un grupo de niños.
Calderón estrechó las manos del sumo pontífice, intercambiaron algunas palabras y saludaron a las banderas del Vaticano y de México.
El avión aterrizó a las 16h13 (22h13 GMT), cuando ya se encontraban el presidente mexicano y jerarcas religiosos en la pista esperando el arribo del jefe de la iglesia católica, constató un equipo de la AFP.
Benedicto XVI fue aclamado por por cientos de invitados que agitaban las banderas blanca y amarilla del Vaticano y la tricolor de México.
El Papa cumplirá una visita en el estado de Guanajuato, donde se reunirá en privado con el presidente Felipe Calderón, celebrará actos religiosos y el lunes partirá rumbo a Santiago de Cuba.
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