BONAO.-En solidaridad ante la situación que atraviesa el país, luego de paso de la tormenta Noel, la Universidad Abierta para Adultos (UAPA) entregó una donación de alimentos y otras necesidades que requieren los damnificados de la comunidad de Bonao, una de las más afectadas por el fenómeno atmosférico. Luz Rosa, directora de Extensión Universitaria en la ciudad de la Villa de las Hortensias y en representación del rector Ángel Hernández, explicó el interés de la UAPA es contribuir a mejorar las condiciones de los damnificados y llevar aliento. La directiva al entregar la ayuda al padre Francisco Jiménez ( Cualo) , párroco de la Iglesia Nuestra Señora de Fátima, indicó que la aportación se eligió a los afectados de Bonao, por ser un pueblo que ha contribuido con la Universidad UAPA, donde cuenta con cientos de egresados y estudiantes. Añadió que el gesto se acoge a la solicitud de la Secretaría de Educación Superior Ciencia y Tecnología (SEESCYT), que dirige Ligia Amada Melo de que las universidades unan esfuerzos para prestar ayudas materiales a los afectados por la tormenta Noel. Rosa, destacó que la Universidad prestó ayuda a varios estudiantes de la UAPA, damnificados por el meteoro de principio de mes. Y dice que la jornada psicológica contará con 18 profesionales de la conducta humana y se pondrá en ejecución en los próximos días, para consultar niños y adultos que han perdido a sus familiares. La donación incluyó alimentos enlatados, leche, agua, calzados, ropa y utensilios para el hogar. De su lado el sacerdote Cualo Rosario, agradeció el gesto de la UAPA en nombre de los beneficiarios y el pueblo de la provincia Monseñor Nouel.
Esta foto del periodista Miguel Hernández, muestra a este pobre joven (indigente), con varios meses recoriendo las calles de Bonao, sin que las autoridades competente hagan algo al respecto. Este pobre ser humano, tiene más de dos meses “viviendo” donde le coja la noche, esta tarde estuvo paseando frente al cuartel policial de aquí de Bonao, el guardia de servicio lo vió y dijo "Ni palla voa mira", en la misma entrada principal de la dotación policial fue fotografiado por el periodista Hernández . Este indigente desnutrido y falta de cucharas, se baña desnudo y hace sus necesidades fisiológicas a la vista de todo el mundo. La permanencia a la intemperie, harapiento y desnutrido de este pobre loco, se ha convertido en espectáculo para los transeúntes que a diario se desplazan a pie y en vehículos por calles de Bonao. El hombre, con visibles signos de trastornos mentales, tiene su mente en blanco, por lo que las autoridades de Salud Pública tienen que hacer algo para que el es
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